Alumnos del colegio Villa San Ignacio visitan planta de Aguas Santiago Poniente en ENEA
Noviembre 2024
La empresa sanitaria, calificada como una de las más eficientes del país, fue recorrida por 43 escolares de 5to básico del colegio quienes, acompañados de sus profesores, conocieron en terreno cómo se administran y distribuyen los recursos hídricos en Santiago.
Aguas Santiago Poniente –cuya planta se encuentra ubicada en ENEA, la ciudad aeropuerto y el principal centro industrial del país- no solo destaca por haber alcanzado el 100% de cumplimiento normativo y ser una de las empresas con menores pérdidas de agua potable del país, sino que también por el notable contacto que mantiene con la comunidad que lo rodea y abastece del vital elemento, los 365 días del año.
Muestra de ello fue la visita realizada por 43 escolares de 5to básico del colegio Villa San Ignacio, prestigioso centro educativo ubicado en El Tranque 1274 en Pudahuel, que desde hace 19 años prepara a más de 400 alumnos provenientes de la comuna y de sus alrededores.
Los estudiantes, acompañados por el jefe de la Unidad Técnica Pedagógica del recinto, Kevin García, y de sus profesoras Paulina Ríos y Marcela Escobar, fueron recibidos por el gerente general de la empresa, Felipe Meza Sánchez, y un grupo de funcionarios de la empresa que los acompañaron en un recorrido donde pudieron conocer cómo se administran y distribuyen los recursos hídricos a cientos de miles de personas en Santiago.
Según relata el profesor García, de esta forma pudieron observar en terreno los enormes estanques de almacenamiento de agua, así como las piscinas de procesamiento y decantación, donde aprendieron que Chile es uno de los pocos países de la región donde se puede consumir agua potable en prácticamente en todos lados y que el uso consciente del recurso hídrico también permite reciclar el vital elemento para otros usos, como es el regadío agrícola.
“Los chicos quedaron impresionados porque son procesos que uno como adulto tampoco conoce, entonces para ellos el ver cómo el agua tiene un tratamiento tan completo, fue una gran enseñanza. Fue una actividad muy entretenida y muy dinámica donde no se dieron espacios muertos, donde los chicos pudieron hacer preguntas que les respondían nuestros anfitriones de un modo muy lúdico y simpático”, señaló García.
Por ello, el balance de la visita de parte del colegio fue sumamente positivo, a tal nivel que buscarán repetirlo con otras empresas de ENEA y Pudahuel, comuna que se caracteriza por disponer de varias de ellas de carácter estratégico, como son la generación eléctrica, de agua y del transporte aéreo.
“Como colegio tenemos una mirada desde la formación ciudadana, donde tratamos de potenciar en nuestros alumnos el saber sobre el lugar donde habitan, lo que también reforzamos a través de la Municipalidad, ya que el alcalde también ha visitado el colegio y nos ha planteado iniciativas propias de la comuna. Esto es una alianza público-privada donde los más beneficiados son nuestros jóvenes”, sentencia García.
APOYO DE ENEA
La relación entre el colegio y Aguas Santiago Poniente, el jefe de la Unidad Técnica Pedagógica del colegio, explica que ésta viene desde hace varios años y se había enmarcado en un concurso de dibujo que realiza dicha empresa para destacar el cuidado y uso eficiente de los recursos hídricos, donde participan junto al vecino Colegio San Luis Beltrán.
Sin embargo, en esta oportunidad, la visita a la planta se concretó gracias a a la invitación de ASP cursada a través del profesor Felipe Rozas, oportunidad en la que también se exploraron otras futuras visitas, por lo que están esperanzado que otras empresas se unan a esta iniciativa y reciban a los alumnos del colegio en estos recorridos académicos.
Con Enea se han realizado diversas actividades, participación en la inauguración del Parque de la Cultura y las Artes y se han explorado otras futuras visitas.
“Creemos que el beneficio es mutuo, ya que la presencia de estudiantes u organizaciones sociales que están en su entorno, les permite posicionarse dentro de la ciudadanía, socializar y explicar las actividades que realizan e, incluso, transmitir a los más jóvenes el interés por alguna carrera que los lleve en el futuro a ser parte de estas actividades”, explica García, agregando que estos objetivos coinciden plenamente con el tipo de educación que busca entregar el colegio Villa San Ignacio.
“Somos un colegio muy inclusivo, ya que recibimos estudiantes de distintos estratos socioeconómicos, principalmente de la comuna de Pudahuel. Podemos afirmar que el colegio es un punto de encuentro entre apoderados con alta vulnerabilidad, pero también otros que no lo son”, señala.
Este colegio fue fundado hace 18 años como un proyecto personal de la profesora Isabel Bravo Elgueta, pensando en construir una escuela pequeña, fundada en valores cristianos y siempre con el objetivo de entregar una educación personalizada a sus alumnos. Producto de los cambios a nivel legal, el colegio Villa San Ignacio tuvo que transformarse y mutar de una escuela particular subvencionada a un colegio dirigido por una fundación.
Con el tiempo este centro educativo ha ido ganando prestigio, como una escuela pequeña, pero preocupada de sus estudiantes, de sus procesos individuales, donde todos los profesores conocen los nombres de sus alumnos y también sus respectivas historias, con un contacto sumamente personalizado.
Ello ha sido ratificado por los buenos resultados dentro del SIMCE medidos tanto respecto al nivel socioeconómicos de sus alumnos, como respecto a los otros recintos educacionales de la zona, lo que los ha posicionado como una de las mejores escuelas de la comuna.